
Y cómo prometí, hoy una de miedo para esta noche en la que se celebra Halloween. Hoy Mirando atrás va a viajar en el tiempo hasta 1980, año en el que se estrenó El resplandor, una película duramente criticada en su época ya que no llegó ser entendida por el público de entonces, no sólo por ser demasiado difícil de entender, si no por la larga duración de ésta haciendo que resultara lenta para muchos espectadores. Aún así, hoy en día, se considera una obra maestra del cine y una película única por no tener ninguna otra referencia en el cine... una película con pocas sorpresas, poca violencia directa, pero aterradora como ninguna hasta el momento.
Basada en una de las novelas de Stephen King, por cierto que a este no le gustó, Kubrick, abordó con maestría un género, el de terror, logrando con su película una de las mejores obras sin necesitar demasiados efectos visuales.
Terror psicológico del bueno que aumenta de manera progresiva según transcurre la historia. Un actor, Jack Nicholson, con una actuación maravillosa y... qué decir del hotel, que ha llegado a considerarse el segundo personaje más importante de la cinta, un hotel con pasillos sin fin (¿quién no ha pasado miedo recorriendo esos pasillos con el puñetero niño y el triciclo? ejemmm perdón por lo de el puñetero, pero menudo miedo que nos hizo pasar), con pisos que parecen esconder cualquier tipo de horror, gigantescos salones con aspecto fantasmal...
La verdad, aún no entiendo como a King no pudo gustarle. En la mente nos quedarán escenas no sólo como la que cité anteriormente del niño, también la del ascensor sangrante, el hacha en la puerta, la cara de loco de Jack...
Escalofriante, asombrosa, fantástica, aterradora... buena.