Sway.

Abrázame fuerte y yo también oiré los sonidos de los violines mucho antes de que empiecen a tocar...

La dama de Shangai.

A pesar de que cuando rodaron la película Orson y Rita ya estaban en trámites de divorcio, continúa notándose que fueron una de las parejas con más química de Hollywood.

En "La dama de Shangai" nada es lo que aparenta. Michael O'Hara (Orson Welles) es un hombre que una solitaria noche conoce a Elsa (Rita), una mujer fascinante para la que acabará trabajando en su pequeño barco y enamorándose perdidamente. Debido a esa fascinación, se verá envuelto en un peligroso juego de intriga y asesinatos. Una magnífica película con un Orson Welles sublime tanto de director como de protagonista...y qué decir de Rita, que ha sido siempre una de mis actrices favoritas.

Errores.

Y vuelvo con Hitchcock, hoy quiero mostraros que hasta en sus películas podemos encontrar pequeños errores..."errare humanum est", vamos...que errar es de humanos.

Rebeca.

Laurence Olivier quería a Vivien Leigh, con la que entonces mantenía una relación, para el papel de la Sra. de Winter por lo que al conseguirlo Joan Fontaine, la tomó con ella tratándola fatal. Hitchcock, viendo el malestar que le producía aquello a la actriz, aprovechó para decirle a Joan que todos en el rodaje la odiaban con la intención de hacerla más tímida y reservada, justo lo que él quería para el personaje...y lo consiguió ¿guardaría ella algún buen recuerdo de "Rebeca"?...supongo que sólo el que estuviera nominada al Óscar por la mejor actriz (premio que ganó Ginger Rogers en "Espejismo de amor") y que la película ganara dos estatuillas.

Sucedió una noche.

Fue la primera película que obtuvo los 5 Óscars más importantes; a la mejor película, al mejor director, mejor guión, mejor actriz principal y mejor actor principal.

En la película Colbert hace de una joven y caprichosa heredera que escapa de su familia al imponerle una boda de conveniencia. Decidirá huir a Nueva York en busca de otro hombre del que piensa estar enamorada. Es en ese viaje donde conoce a Peter, un periodista fracasado que la seguirá para obtener la noticia de su vida.

Durante el rodaje de la película, la actriz Claudette Colbert se comportó de forma caprichosa constantemente, además de ser una quejica...vamos que era una joyita. Un ejemplo de ello fue cuando se negó hacer la escena donde debía de enseñar la pierna haciendo auto stop, se contrató entonces a una extra para que hiciera la toma en su lugar y cuando vio que el equipo se disponía a grabar, volvió a cambiar de opinión. Así que lo paró todo gritando y dijo:

"Sáquenla de ahí...esa no es mi pierna...yo lo haré".

¡Graciassss!.

Acabo de recibir un premio que me ha hecho mucha ilusión de manos de Géminis del blog "diario de una géminis", desde aquí quiero agradecerle el detalle y compartirlo con las chicas que me siguen, sí, ya sé que sólo lo debería de dar a cinco, pero para mi es muy difícil elegir...chicos,chicos no os enfadéis, os prometo que si hay otro en un futuro os lo daré a vosotros. Mi decisión enseguida la entenderéis...

El primer King Kong.

"Mira como se ríe la monada..."

En la película de King Kong de 1933, los pelos del poco agraciado animalito en determinados momentos podemos verlos que se agitan rápidamente en algunas zonas. El por qué de esto se debía a que en el proceso de animación foto a foto, los animadores tenían que manipular a la figura de King Kong con sus manos y al hacerlo las huellas de sus dedos quedaban marcadas sobre los pelos, como esto sucedía a cada fotograma, el resultado final hacía parecer que éstos se movían.

A continuación os dejo algunos errores de la película...yo aún me estoy riendo del primero.

Fred & Ginger.

Siempre he sido nula para el baile...no es que quisiera bailar como lo hacían ellos, pero sí un poco. Recuerdo que de pequeña, cuando veía una de sus películas, me ponía a bailar delante de la tele...je,je, yo que sé como me movía, no me lo quiero ni imaginar, pero anda que no lo pasaba bien...

La fiera de mi niña.

La película cuando se estrenó fue todo un fracaso, Howard Hawks (su director) fue despedido de la RKO, con quien había firmado un contrato de seis películas, al igual que Katherine Hepburn, de la cual la crítica en aquél momento dijo que era veneno para la taquilla. Extraño que por entonces no funcionara y sí lo hiciera años más tarde convirtiéndose en una de las mejores comedias jamás rodadas...un claro ejemplo de que los gustos cambian con las épocas.

Hoy escucho a Louis.

"Dame un beso para construir un sueño" decía Armstrong...pues ya sabeis, a construir, a construir.

Una auténtica comedia negra.

Si no hubiera sido porque Bob Hope no se pudo liberar de un contrato que le unía a la Paramount, éste habría sido el protagonista de la película. Capra lo intentaría después con otros como Jack Benny o Ronald Reagan, pero finalmente como ya sabéis el elegido fue Cary Grant.
Una película divertida, entretenida y llena de escenas memorables como la que os dejo a continuación.

Marylin.

¿Acaso no era bonita hasta su voz?...

Bette Davis.

Como todas las grandes de cine tuvo sus rivalidades y que no soportaba a Joan Crawford, se hizo más que visible en "Qué pasó con Baby Jane", donde como sabréis trabajaron las dos. Dicen que durante el rodaje Bette Davis pidió tener en su camerino una máquina dispensadora de coca-cola para enfurecer a Joan, que estaba casada con un alto directivo de Pepsi y que en una de las escenas de la película donde debían simular una pelea, ambas lo hicieron tan real que a la Cawford le tuvieron que poner puntos después de un golpe en la cabeza. Más tarde, cuando Bette tuvo que arrastrar a Joan en otra escena, dicen que esta última acabó vengándose poniéndose pesas en sus bolsillos para que le costara más trabajo llevarla...¡Vaya dos!.

Te mando mil.

Hoy sólo pienso en besarte...volveré a tirar mis besos al aire.

Vivien Leigh.

Cuentan que en 1939 para conseguir el papel de Escarlata O'Hara hubo cientos de aspirantes que para conseguir el papel provocaban situaciones de todo tipo, desde perseguir por todo un tren al realizador David O'Selznick, teniendo este que resguardarse acosado en la carbonera, hasta presentarse en la oficina del mismo en el interior de un paquete para después correr detrás de él desnudándose recitando versos...¡Pufff! imaginaros la situación.